Hace unos días tuvimos invitados
en casa, y como en casi todas estas veladas, intentamos hacer algún plato nuevo
con un toque de cierta originalidad que pueda, si a estas alturas es posible,
llegar a sorprender. La idea primitiva, fue la de hacer algo que no requiera la
presencia del cocinero en la cocina mientras los invitados esperan en la mesa.
Una empanada o una quiche cumplirían con estos requisitos. Con este
propósito nos lanzamos a la búsqueda,
más algún tipo de pastel o quiche que empanada. No estuvimos mucho tiempo,
cuando dimos con un receta que se acoplaba a las mil maravillas a nuestras
pretensiones y fue ésta quiche de morcilla y manzana que encontré en el blog de cosas con encanto. La
elaboración no tenía mucha dificultad, más bien poca, si bien algo de laboriosidad. Para hacer la masa, en lugar de comprarla ya hecha,
la hicimos nosotros, subiendo aún más nuestro grado de satisfacción.
Los Ingredientes.
Para la masa quebrada:
250 gr. de harina.
60 gr. de mantequilla.
60 gr. de manteca de cerdo.
1 huevo.
1/2 cucharada de sal.
1/2 cucharada de azúcar.
60 gr. de mantequilla.
60 gr. de manteca de cerdo.
1 huevo.
1/2 cucharada de sal.
1/2 cucharada de azúcar.
Para el relleno:
1 cebolla.
2 puerros.
2 manzanas Golden.
4 huevos
1 brick pequeño de nata y un chorrito de leche.
250 gr. de morcilla de cebolla
Piñones.
Sal y pimienta
100 gr. de queso (Cheddar o Emmental).
2 puerros.
2 manzanas Golden.
4 huevos
1 brick pequeño de nata y un chorrito de leche.
250 gr. de morcilla de cebolla
Piñones.
Sal y pimienta
100 gr. de queso (Cheddar o Emmental).
La Faena.
Como hicimos con el Lemon Pie, primero
hemos de preparar la masa empezar a cocerla. Esta vez he probado una forma
distinta de hacerla. El aceite de oliva ha dejado paso a la mantequilla y, sin que sirva
de precedente, he suprimido la leche. En un cuenco mezclamos todos los
ingredientes y amasamos con cuidado. Cuando la tengamos bien amasada, la liamos en papel film y la dejamos
en el frigorífico reposar, para que gane resistencia.
Para no perder tiempo,
mientras tenemos la masa en el frigorífico, y luego en el horno, podemos ir haciendo
el relleno.
Partimos los puerros y la
cebolla, lo pochamos todo a fuego suave con poco aceite. Casi al final, cuando estén
doradas las cebollas, añadimos la manzana cortada a rebanadas hasta terminar de
pochar. Entonces extendemos este sofrito sobre la masa semi-cocinada.
En la sartén doramos los
piñones, añadimos las morcillas sin tripa, mezclamos y lo colocamos sobre el
sofrito de manzana. Y sobre la morcilla repartiremos el queso hecho trocitos
pequeños.
Aparte en un bol batir los
huevos, salpimentamos y mezclamos con la nata y un chorrito de leche. Vertemos
el batido dentro de la masa, de tal forma que cubra todo, intentando repartirlo
de manera homogénea. Horneamos a 180 º unos 30 minutos hasta que esté cuajado y
con un color dorado. Los primeros 10 minutos, es aconsejable usar solo el calor inferior. Trascurrida la media hora, podemos pinchar con un palillo para comprobar el punto de cocción. En el caso
que tengamos dudas.
Es recomendable hacer la quiche con antelación, para que podamos dejarlo atemperamentar, pues es un plato que se disfruta mucho más templado que frío o caliente.
1 comentario:
Me encantan los quiches, yo también he hecho el de morcilla, aunque yo he usado morcilla de cebolla, quiero probar a hacerla también con morcilla de carne y morcilla de burgos a ver como esta.
Publicar un comentario